5 cirugías de corazón abierto y 16 cateterismos cardíacos fueron realizadas brindando esperanza de vida a los niños afectados con malformaciones en el corazón.
Tegucigalpa, MDC, 19 de enero de 2024. La noble labor de sanar corazones se materializa nuevamente en la colaboración entre el Hospital María, Especialidades Pediátricas (HMEP), y World Pediatric Project Honduras, en una brigada de cirugía cardiovascular y hemodinamia que se llevó a cabo del 15 al 19 de enero, brindando esperanza de vida para niños y adolescentes de diferentes partes del país.
Durante estos cinco días de intervenciones quirúrgicas, se llevaron a cabo un total de cinco (5) cirugías cardiovasculares y dieciséis (16) cateterismos. Este esfuerzo conjunto busca brindar atención médica especializada e integral sin costo, a pacientes que, con valentía, enfrentan condiciones cardiacas desde los 2 meses hasta los 17 años de edad.
El HMEP, expresa su más profundo agradecimiento al valioso equipo de brigadistas de World Pediatric Project, quienes han viajado desde Memphis y Las Vegas, conformado por Álvaro Galindo, Cardiólogo intervencionista; Kendal Truelsen, Anestesiólogo; Lesley Hansen y Erick Núñez, enfermeros especialistas en cuidados intensivos; Umar Boston, cirujano; Mario Briceño, intensivista pediatra y Adam Halem, técnico en terapia respiratoria, cuyo compromiso y dedicación han hecho posible llevar a cabo esta misión humanitaria, así como al excepcional equipo multidisciplinario liderado por la Dra. Sonia Solórzano, Dr. Víctor Paz y Dra. Daniela García, y que incluye además anestesiólogos, intensivistas, instrumentistas, enfermeros, personal de apoyo de los diferentes servicios en el hospital, cuyo profesionalismo y calidez, traducido en un servicio integral, han marcado la diferencia en la vida de estos niños y sus familias.
En el corazón de esta alianza, permanece el interés de garantizar que ningún niño se vea limitado por condiciones médicas que afecten su calidad de vida. Más allá de las estadísticas, estamos tejiendo historias de esperanza, resiliencia y, sobre todo, amor.
En el HMEP se mantiene un compromiso con la niñez hondureñas a través de la noble misión de salvar vidas ofreciendo un futuro más brillante a estos pequeños corazones llenos de sueños.